Judy Cochran es una anciana de 73 años, y además es alcaldesa en Livingston, Texas (EE.UU). La mujer se ha convertido en el centro de atención tras dar muerte, ella sola, a un inmenso caimán de más de tres metros y 260 kilos, que hace unos años acabó con la vida de uno de sus ponis.
Hace dos años el animal, muy querido por Cochran, desapareció sin dejar rastro alguno y en extrañas condiciones. En ese momento, la policía le explicó que muy probablemente, un enorme caimán se habría llevado al pequeño equino para devorárselo, ya que nunca se halló el cuerpo del animal.
Según Houston Chronicle, Judy se percató hace unos días que un gran caimán merodeaba por los pantanos de la granja que tiene en la localidad de Goodrich y en donde tenía al pony.
“Creemos que es el caimán que se comió a uno de nuestros ponis hace varios años, era tan grande como este, podría habérselo comido fácilmente. Por lo general, los caimanes no nos molestan, pero a este lo hemos estado buscando”, dijo la mujer al medio citado.
Entonces, la anciana puso en marcha todo un plan, con ayuda de su familia, para poder cazar al caimán. Lo primero que hizo fue capturar a un mapache, que ya muerto lo usó de cebo, sazonándolo para que le fuera atractivo al reptil.
Finalmente, el pasado lunes, el enorme depredador cayó en la trampa y rápidamente le informaron a Judy, quien sin pensarlo 2 veces, tomó un rifle y le disparó para así acabar con él y vengar la muerte de su amado pony.
El hecho ha causado polémica entre los habitantes de su localidad, particularmente entre los defensores de los animales. Mediante un comunicado, la alcaldesa declaró que fue una “caza ética y segura”. La gente se ha quejado de por qué lo mató en lugar de reubicarlo, e incluso una mujer ha iniciado una petición para que la destituyan del cargo, informó el New York Times.
