El Reino Unido continúa siendo el segundo destino más popular para la inversión española en el extranjero con un ‘stock’ de 83.000 millones de euros, incluso pese a haberse contraído un 9,5% en 2023, lo que se ha traducido en la creación de más de 80.700 empleos directos y 60.200 indirectos en dicho país.
Según el séptimo ‘Barómetro sobre el Clima y Perspectivas de la Inversión Española en el Reino Unido’ elaborado por la Cámara de Comercio de España en la nación insular, Gran Bretaña ha acaparado el 13,1% del total de inversiones españolas realizadas a nivel mundial. En este sentido, Reino Unido lleva acumulados 170.940 millones de euros de flujos inversores procedentes de España desde 1994.
El desembarco de capital español siguió mostrando signos de recuperación en 2024 tras alcanzar los 4.880 millones de euros, lo que permitió al Reino Unido revalidar el título de segundo destino de la IED española ese año.
Sin embargo, los flujos se desaceleraron en la primera mitad de 2025 hasta quedarse en los 331 millones de euros, con unos patrones sectoriales que destacaron por una «concentración y enfoques estratégicos continuos».
En 2024, las telecomunicaciones atrajeron el 60,5% del total de flujos (2.950 millones de euros), seguidas del 12,5% de la fabricación de perfumes y productos de tocador (609 millones de euros). En el primer semestre de 2025, el suministro de energía supuso el 73,7% de los flujos (244 millones de euros).
Ciertos sectores siguen altamente concentrados en Reino Unido, como el transporte aéreo, que alberga el 96,2% de la IED aeronáutica española (2.590 millones de euros). Los sectores más grandes por ‘stock’ en 2023 fueron los servicios financieros, con 21.340 millones de euros, y el comercio mayorista, con 18.020 millones de euros.
«La inversión española en Reino Unido sigue siendo resiliente y estratégica. El barómetro de este año revela una actividad notable en sectores clave como las telecomunicaciones, la energía y los cosméticos, así como un interés continuo por la transformación digital y la productividad», ha afirmado el presidente de la Cámara de Comercio en Reino Unido, Juan Carlos Machuca.
CLIMA Y EXPECTATIVAS
Las compañías españolas que operan en Reino Unido calificaron el clima empresarial con una puntuación de 2,9 sobre 5, prácticamente sin cambios desde 2024, aunque el 47% de las mismas informó de un ligero deterioro en los últimos doce meses. Siete de cada diez siguen valorando el entorno como «aceptable» o mejor.
Los atributos más sólidos continuaron siendo un «ecosistema favorable para el desarrollo e implementación de procesos digitales» y el «compromiso con la sostenibilidad a nivel económico y empresarial», ambos con 3,6 puntos. De su lado, la inversión en I+D, con 2,7 enteros, se llevó la peor nota.
Ya de cara a 2026, las expectativas de las empresas españolas siguen siendo positivas. Más del 60% espera que sus ingresos aumenten, el 45% planea incrementar sus inversiones, especialmente, en Londres y su área metropolitana, y el 89% anticipa mantener o aumentar su plantilla, con un 37% planificando nuevas contrataciones.
La mejora de la productividad es el principal impulsor de las nuevas inversiones, con un 49% de empresas pretendiendo implementar nuevas tecnologías digitales, un 38% ampliar sus plantillas y un 33% enfocándose en iniciativas de formación.
«Es importante destacar que la mayoría de las empresas españolas en Reino Unido tienen previsto ampliar o mantener su plantilla, lo que constituye una clara señal de su compromiso a largo plazo y de la tendencia a mantener un buen rendimiento», ha manifestado Machuca.
En suma, el Reino Unido es visto como un «mercado estratégico» por el 90% de las empresas españolas. De hecho, el 75% descartan directamente su salida de dicho mercado en los próximos cinco años y otro 15% lo considera «improbable».