El expresidente de la Generalitat y candidato de Junts a las elecciones catalanas del 12 de mayo, Carles Puigdemont, ha afirmado que la Ley de Amnistía le permitirá trabajar «sin la amenaza de una represión feroz y omnívora, que aún pesa como una losa».
«La Ley de Amnistía comportará la revisión de un error en el cual cayeron tanto el PP como el PSOE, y que un estado de derecho no se puede permitir: el error de delegar en la policía y la judicatura lo que era claramente responsabilidad de la política», ha dicho en una conferencia en el Ayuntamiento de Elna (Francia).
De hecho, ha destacado que la Ley de Amnistía es uno de los acuerdos de «gran relevancia» que ha logrado Junts desde que alcanzó un pacto con el PSOE para investir al actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
También ha dicho que Junts ha sido capaz de abrir una nueva fase política que han aprovechado para que pasen cosas que nunca habían pasado, como que Sánchez fuera investido por un acuerdo negociado y firmado fuera de España, lo que ven como «la primera muestra de excepcionalidad».
También ha subrayado que, en el acuerdo de Bruselas, ‘juntaires’ y socialistas compartieron de «forma inédita» un mismo relato de las razones que han desembocado en el conflicto político entre Catalunya y el resto de España, según él.
MEDIADOR INTERNACIONAL
Asimismo, ha celebrado que se haya «normalizado» el uso del catalán en el Congreso; que se hayan iniciado los trámites para pedir su oficialidad en las instituciones europeas, y que se haya logrado un espacio de negociación en Suiza con mediación internacional.
«No es lo mismo reunirse en la Moncloa, que es como jugar en el Bernabéu con el árbitro y el VAR a favor de los locales, que hacerlo en Suiza con mediación internacional, que es como jugar en Wembley con árbitros neutrales», ha ejemplificado.
