La nadadora Nuria Marqués consiguió este lunes la medalla de plata en los 100 metros espalda de los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020, con lo que revalidó ese mismo metal logrado en Río 2016.
Marqués, de 22 años, hizo el segundo mejor tiempo de las finalistas durante la jornada matinal en el Centro Acuático de Tokio (1’10″45), sólo por detrás de la estadounidense Hannah Aspden (1’09″83) y por delante de la neozelandesa Sophie Pascoe (1’11″02).
En la final, la nadadora barcelonesa terminó el primer medio hectómetro en tercera posición, por detrás de Aspden y de Pascoe, y remontó en los últimos metros para hacerse con la medalla de plata con un tiempo de 1’10″26. La estadounidense obtuvo el oro (1’09″22) y la neozelandesa, el bronce (1’11″15).
«Me siento muy bien porque han sido años muy duros, principalmente este último con la pandemia y ha sido difícil mantenerse con el parón», comentó Marqués. «Dos meses sin nadar no lo tenemos ni en vacaciones».
La nadadora catalana indicó que la medalla de plata es «muy reconfortante», si bien subrayó: «Me he quedado con el gustillo de que podía haberlo hecho un poco mejor, pero en estas condiciones he dado mi 100% y con eso me quedo».
Nuria Marqués compite en natación desde que tenía 11 años y sólo dos después ya formaba parte del equipo español. Fue la deportista revelación de la delegación nacional los Juegos Paralímpicos de Río 2016, donde conquistó una medalla de oro en los 400 metros libre y otra de plata en los 100 espalda, en ambos casos de la clase S9.
Marqués cuenta en su palmarés con dos medallas en Juegos Paralímpicos, 12 en Mundiales y 20 en Europeos. Además, posee los récords de España en 50, 100 y 200 metros espalda, así como en 400 libre, y compatibiliza el deporte con sus estudios de fisioterapia.
