En el punto de mira desde que el pasado 15 de octubre se convirtió en el ganador del Premio Planeta con su novela ‘Vera, una historia de amor’ por las demoledoras críticas que ha recibido cuestionando si se merecía ganar el prestigioso galardón poniendo en duda la calidad de su libro, Juan del Val ha visitado ‘El Hormiguero’ y, rotundo, ha respondido a los ataques.
Cambiando este jueves su rol de colaborador del debate -junto a su mujer Nuria Roca, Tamara Falcó y Cristina Pardo- por el de invitado, el tertuliano ha entrado a plató con una declaración de intenciones: «Vamos a hablar de lo que tú quieras. Yo tengo ganas de hablar. Es importante entender que estoy muy feliz por todo lo que ha sucedido. Ganar este premio me ha hecho feliz a mi y a gente a la quiero. Lo demás es secundario», ha asegurado.
Feliz a pesar de las críticas que está recibiendo ‘Vera, una historia de amor’, Juan se ha mostrado muy agradecido por la «fabulosa» acogida que está recibiendo entre los lectores, ya que tras su publicación este miércoles 5 de noviembre se ha posicionado como una de las novelas más vendidas del momento. «La gente tenía ganas, se ha generado mucha expectación por todo lo que se ha hablado y el ruido» ha admitido.
Confesando que nunca llegó a imaginar que podría ganar el Planeta -«es algo tan fantástico que no crees que te pueda pasar a ti, y de repente, por determinadas circunstancias te pasa a ti» ha reconocido- el escritor ha expresado que ha «puesto el alma» en este libro y, visiblemente cansado, ha respondido a las críticas, que le duelen no por él sino por las personas que le rodean y que se han alegrado casi tanto como él por el premio.
«Las críticas eran muy previsibles, era evidente que iban a llegar. Algunas me las gano yo mismo, porque puede molestar mi éxito por diferentes motivos; porque soy crítico con el poder, y el poder es el que es. También puede que transmita cierta virulencia al expresar mis opiniones, y eso incomoda. Creo que me llevo mis propias críticas y las tuyas (a Pablo Motos), es decir, las de trabajar en ‘El Hormiguero'» ha explicado mientras el presentador asentía al escuchar sus palabras.
Y aunque ha asegurado que «es muy difícil quitarme mi alegría, removerme es algo complicado porque esto ha sido un milagro teniendo en cuenta mi origen» -ya que fue muy mal estudiante y su primer empleo fue como albañil- sí ha confesado que le ha dolido especialmente ver a su entorno afectado por los ataques que ha recibido: «Yo soy responsable de lo que digo o hago, asumo las críticas por la novela o por lo que digo aquí sentado. Esos golpes son para mí, pero ver a la gente que quieres pasarlo mal me dejó fatal, y eso que soy bastante duro». «No quería salir de casa, aunque también es verdad que se me pasó pronto», ha añadido con una sonrisa.
El Planeta, como ha deslizado, le ha emocionado especialmente por sus padres -de 89 y 85 años- los primeros con los que habló por teléfono tras recibir el galardón. «Lo primero que me dijo mi madre fue ‘con lo que hemos pasado tú y yo'» ha revelado, relatando que «fuimos una familia humilde y por los dos lados, evolucionaron a través de los estudios. En mi casa era una obsesión, era la única salvación. De mis 11 primos, soy el único que no fui a la universidad». «Ese fracaso, que venía condicionado por un montón de circunstancias, que me creó una herida que no supe solucionar. Se la trasladé a mis padres, ves que no hay una salida. Pensaba que mi fracaso era su fracaso, me marcó hasta un punto que salí y salí mal», ha expresado conmovido.