Aunque el impulso totalmente eléctrico de Mercedes, está cobrando fuerza, pero no está abandonando sus potentísimos motores V8 todavía. Llega ahora el nuevo Mercedes AMG S 63 E-Performance, de 791 CV, que irrumpe en el mercado con un sistema de propulsión híbrido enchufable V8 de 4.0 litros con doble turbocompresor y un ajuste del chasis a medida.
Es el AMG más potente de la historia, con su motor de combustión de 604 CV que e complementa con un motor eléctrico montado en la parte trasera, de 187 CV, alimentado por una batería de 13,1 kWh también situada sobre el eje trasero.
La unidad se ha desarrollado en asociación con la división de tren motriz de Fórmula 1 de la compañía, y ofrece 35 kms de funcionamiento puramente eléctrico. A pesar de pesar 2.595 kg, la berlina de lujo alcanza los 100 km/h desde el reposo, en 3’3 segundos y desarrolla una velocidad máxima limitada a 250 km/h, que con el AMG Driver’s Package opcional, esto aumenta a 290 ,km/h. La tracción se transmite a las cuatro ruedas a través de una caja de cambios de embrague múltiple, de nueve velocidades, y en la parte trasera hay un diferencial de deslizamiento limitado, controlado electrónicamente y una caja de cambios adicional de dos velocidades, lo que cambia a su relación más alta, a alrededor de 140 kms/h para mejorar la eficiencia del motor eléctrico, y el motor de combustión se puede desacoplar para minimizar las pérdidas del tren motriz.
El conductor puede elegir entre cuatro etapas de regeneración de energía para recargar la batería. Además, dispone de siete modos de conducción que van desde el modo puramente eléctrico hasta Sport +, que aumenta la dirección, la suspensión y la entrega de potencia, para lograr la máxima agresividad.
El S 63 también incorpora la dirección de las ruedas traseras, para enmascarar su considerable longitud de 5’3 metros, girando las ruedas traseras en dirección opuesta a las delanteras hasta 2’5 grados a baja velocidad. Más allá de los ,m 100 kms/h, los ejes delantero y trasero giran en la misma dirección para mayor estabilidad. Los frenos compuestos mejorados figuran en el equipamiento de serie, aunque los elementos cerámicos más livianos, están disponibles a un coste adicional.
Para significar el rendimiento adicional, el S 63 tiene una nueva parrilla con listones verticales y parachoques más robustos. Típico de un AMG, se han integrado cuatro tubos de escape en el faldón trasero y, los umbrales laterales más profundos, brindan una postura más agachada. Para ayudar a aplicar la significativa potencia del S 63 a la carretera, equupa un juego de ruedas forjadas de 21 pulgadas envueltas en neumáticos Michelin Pilot Sport 4 S.
Interiorismo y tecnología
El interior, es similar al de la Clase S estándar, excepto por un diseño de tapicería único con logotipos AMG grabados en los reposacabezas. También, hay numerosos materiales de acabado a medida repartidos por el habitáculo, es un estricto cuatro plazas con sillones individuales de «Primera clase», en la parte trasera. Hay que señalar que la batería de alto rendimiento reduce la capacidad del maletero, que es de 305 litros. Existen controles físicos mínimos en el interior, con funciones de infoentretenimiento atendidas por una pantalla táctil vertical de 12’3 pulgadas en el medio del tablero, que se combina con un grupo de instrumentos totalmente digital y ejecuta el software MBUX de Mercedes, aunque con ajustes específicos de AMG. Estos incluyen un tema de Supersport atrevido y pantallas de rendimiento, que enumeran las temperaturas del tren motriz y los modos de condución. Los datos de telemetría también están disponibles a través del menú AMG Track Pace.
Una pantalla frontal de realidad aumentada, asistencias de conducción semiautónomas y el asistente de voz «Hey Mercedes», también forman parte del conjunto tecnológico integral de la Clase S, mientras que un par de pantallas en los asientos traseros reflejan la interfaz de usuario de la pantalla táctil principal. El precio, todavía no se ha hecho público, pero teniendo en cuenta su compleja configuración híbrida y su gran potencia, podría costar más de 175.000 euros.
