El Atlético de Madrid ha batido este domingo por 2-1 a la UD Almería gracias a un doblete del ariete francés Antoine Griezmann, en un partido correspondiente a la 29ª jornada de LaLiga Santander y que ha servido a los colchoneros para consolidar su tercera posición en la tabla, siguiendo así la estela del Real Madrid en su particular lucha por hacerse con el subcampeonato liguero.
Si bien el FC Barcelona descuenta hojas del calendario para amarrar el título, paulatinamente a base de empates, las matemáticas aún permiten que sus perseguidores agoten posibilidades y sueñen con una hecatombe culé. Mientras el Madrid había hecho los deberes en la sesión sabatina, ganando por 0-2 en su visita al Cádiz, el Atlético necesitaba doblegar 24 horas después al conjunto almeriense.
Así, los pupilos de Diego Pablo Simeone regresaban en el Cívitas Metropolitano a la actividad liguera para retomar su racha positiva. Más de tres meses sin perder era un buen aval para asustar al Almería, inmerso en la pelea por no descender a Segunda División. Sin embargo, el Atleti había caído frente al Besiktas (2-0) en un amistoso intersemanal y eso podía generar dudas.
Para disiparlas, los locales salieron casi en tromba y Antoine Griezmann avisó pronto del peligro, sacando una falta lejana cuyo disparo se marchó por encima del travesaño. Apenas unos minutos más tarde, en el 4′, los argentinos Nahuel Molina y Ángel Correa robaron al alimón una pelota que acabó en saque de esquina, como preludio del primer gol.
El carrilero belga Yannick Carrasco botó ese córner al primer palo, donde precisamente Correa prolongó de cabeza hacia atrás, para que en el área pequeña Griezmann se zafase de Alejandro Centelles en un salto y cabecease al fondo de las mallas. Espoleados por el 1-0, los del ‘Cholo’ Simeone se hicieron dueños de la dinámica del partido, sin conceder espacios atrás.
Correa, muy aplaudido por las gradas del Metropolitano tras el reciente fallecimiento de su madre, a punto estuvo de marcar con una virguería en el minuto 26. Bien posicionado en el área rival, recibió de Griezmann un pase filtrado a la vez que se giraba en el control y, de inmediato, remató de rabona. El golpeo invitaba a la zurda, pero el ’10’ colchonero tiró con la diestra.
Aunque el balón se marchó por encima de la portería almeriense, dejaba claro la confianza que el Atleti tenía para solventar el encuentro hasta ese momento. Los visitantes no habían disparado a puerta y Jan Oblak era un espectador de lujo del partido, pero la paradoja fue que casi su primera intervención llegó para recoger el balón del fondo de sus dominios.
Un mal pase de Correa hacia sus compañeros en defensa, en dirección a su propio campo, supuso una asistencia involuntaria para que Leo Baptistao saliera al galope por la banda izquierda. El exjugador del Atleti le ganó esa carrera a Axel Witsel y tiró nada más meterse en el área local. Su tiro rebotó en Josema Giménez, que se había lanzado al suelo para cubrir hueco, y la parábola del balón rebasó a Oblak por encima de la cabeza hasta colarse.
GRIEZMANN SALE AL RESCATE ANTES DEL DESCANSO
Cuando todo parecía indicar una igualada al descanso, de nuevo apareció Griezmann para desperezar a los suyos. El ‘8’ colchonero hizo el 2-1 tras una buena combinación suya con Correa en el balcón del área andaluza, mandando el balón al costado izquierdo; ahí, Carrasco templó y dribló a un defensor antes de asistir a Griezmann.
El francés golpeó seco, a bocajarro y por abajo, con el pie zurdo. Gracias a ese chute de energía, los del Cholo buscaron la sentencia al regreso de los vestuarios. Eso sí, sestearon un poco hasta el minuto 60, cuando remataron al mismo palo hasta en dos ocasiones. Primero lo intentó Carrasco a tenor de un zurdazo marca de la casa; y casi a continuación, el propio Griezmann rozó su ‘hat-trick’ tras una asistencia de Llorente.
El Almería estaba grogui, pues ni con los cambios efectuados por su entrenador Rubi se envalentonaba. Pero en los compases finales, ante la relajación del cuadro local, sacó garra para poner en aprietos a Oblak en un par de jugadas con veneno. Incluso reclamaron un penalti los almerienses, fruto de un balón tocado por Giménez con su brazo izquierdo, merced a un centro lateral sin excesivo peligro.
La revisión del VAR, que se hizo esperar porque no salía la pelota del campo, determinó que había un fuera de juego previo del delantero visitante Luis Suárez. Ahí se agotaron las opciones de los pupilos de Rubi, situados al borde del descenso con 30 puntos. Por su parte, el Atlético alcanzó con esta buena cosecha los 60 puntos para seguir a solo dos del Madrid.