El Atleti se pone tercero tras darse un festín

Redacción

El Atlético de Madrid goleó (6-1) este sábado al Sevilla en la jornada 24 de LaLiga Santander celebrada en el Cívitas Metropolitano, un recital local ante un coladero andaluz que permite a los rojiblancos asaltar la tercera plaza de la tabla en un día de homenaje a Diego Pablo Simeone.

El feudo atlético ganó enteros para recuperar su esencia y fortaleza en un año que no está siendo el mejor con un festín para aprovechar el empate el día anterior de la Real Sociedad y subir así al podio liguero, con 45 puntos, uno más que los vascos. Mientras, el Sevilla, en su cuarta jornada sin ganar de las últimas cinco, aflora su crisis pendiente del descenso.

Con la fiesta del ‘Cholo’ por superar a Luis Aragonés como entrenador con más partidos a cargo del Atlético (613), el Metropolitano siguió la celebración gracias a Memphis. El neerlandés respondió a la titularidad rompiendo a la defensa rival en su desmarque en el 23′ y a los dos minutos fusiló también el segundo.

Con 2-0 y un Sevilla que perdía un balón tras otro en el centro del campo, el cuadro madrileño vivió tranquilo hasta que, justo antes del descanso, En-Nesyri recortó distancias en un buen balón que ganó Gueye. Fue un espejismo, porque parecía más cerca la goleada local y, en la reanudación, las sensaciones se confirmaron.

Griezmann se apuntó a la fiesta con un tremendo latigazo para hacer el tercero de la noche, con un abrazo al ‘Cholo’ como celebración, y a Sampaoli le cambió los planes. El técnico visitante tuvo que meter delanteros cuando tenía otros cambios esperando en la banda, pero el Sevilla fue un juguete en manos de un Atlético con ganas de aprovechar los vientos favorables.

Así fue como Carrasco hizo el cuarto, en una jugada bien trenzada hasta un último pase de Barrios, todo lo contrario que un conjunto andaluz negado, como en el penalti fallado de Rakitic, que echó de menos la seriedad del ausente Fernando. A los dos minutos de esa pena máxima al palo, el Atlético amplió la goleada con un Álvaro Morata que no quiso perder territorio.

El internacional español saltó del banquillo con un doblete, el 6-1 de especial belleza y calidad, para convertir el Metropolitano en una fiesta, con menos pique entre pitos y cánticos de un bando y otro de la misma afición gracias a los goles. El Sevilla, que no gana a domicilio al Atlético desde 2008, firmó un desastre antes de los octavos de final de la Liga Europa ante el Fenerbahçe.

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