El conjunto de habilidades que permiten a una persona relacionarse con otros y comprender su entorno es la psicomotricidad. Cuando se trata de la educación de los niños, esta disciplina comprende el desarrollo integral para lograr una postura, motricidad y expresión corporal correcta.
En este sentido, se conoce como sala de psicomotricidad a aquel espacio destinado al ejercicio físico, mental, emocional y social de los más pequeños. Estos lugares suelen estar acondicionados para estimular el movimiento y aprendizaje de los niños y niñas mientras juegan. Por ello, cuentan con una serie de equipamientos para salas de psicomotricidad elaborados por empresas autorizadas como LUDIFOAM.
¿Cómo está compuesta una sala de psicomotricidad?
Las salas de psicomotricidad tienen una finalidad específica. Por ello, su organización debe ser entretenida, sin perder el enfoque didáctico. De acuerdo con los especialistas, estos espacios deben facilitar áreas para el desarrollo de la postura, el equilibrio, la comunicación, la coordinación, la interpretación del espacio y las emociones. Esto se logra con un espacio amplio que tenga buena iluminación, una decoración animada, equipamiento de diversos materiales, juegos y otros artículos seguros para los niños y niñas.
Según las habilidades trabajadas, las salas se pueden dividir en tres espacios, comenzando por un área para que los más pequeños relacionen su cuerpo con el entorno. En esta se necesitan objetos grandes que permitan medir límites y distancia, así como capacidad física. La segunda de las áreas está indicada para que desarrollen sus emociones y creatividad, en este caso, puede ser a través del arte o la creación. Por último, el área cognitiva debe representar desafíos para los niños y niñas, de esta forma, aumentan su destreza mental.
¿Qué equipos son necesarios para salas de psicomotricidad?
Los equipamientos para salas de psicomotricidad varían en función de la edad de los niños y niñas que van a hacer uso de estos. No obstante, hay materiales que se repiten en todas las salas debido a sus beneficios. Entre los productos más usados destacan las colchonetas, módulos de goma espuma, cojines, telas, bancos, aros, espejos, pelotas y juguetes.
Para proporcionar todos los materiales necesarios en una sala de psicomotricidad, empresas como LUDIFOAM se encargan de la fabricación de equipamientos especiales para el aprendizaje de los menores. La compañía confecciona sus productos con PVC BABY, un material resistente, cómodo y seguro para garantizar el bienestar de los niños y niñas mientras juegan.
El catálogo incluye pistas y grupos psicomotrices enteros, colchonetas, acolchados para paredes, muros y puertas, hamacas y columpios, entre otras opciones divertidas.
Además, la empresa ofrece varios servicios de confección. Por un lado, puede fabricar cualquier equipamiento desde cero con materiales de alta calidad. Por otra parte, los expertos pueden diseñar proyectos a la medida del cliente, de esta forma, el recorrido didáctico se ajusta al espacio disponible y no pierde eficacia. Finalmente, LUDIFOAM cuenta con un servicio de montaje para facilitar la tarea de instalación del material.
El objetivo de las salas de psicomotricidad es preparar a los niños y niñas desde sus primeros meses de vida para enfrentar de manera exitosa los retos que encontrarán en su futuro, y este camino es más fácil de recorrer hoy en día gracias a empresas como LUDIFOAM.